18.6.09

Maldito recuerdo.

Entre ojos de divino color
Divagan mis pesares.
Alimentando solo un poco, la ilusión,
Para morir luego, solo parcialmente,
Nunca se esta lo suficientemente vivo
Como para morir totalmente,
Ni es tan grande la desdicha
Como para creer haber vivido.
De repente… en un sueño lejano
Vuelven a mi aquellas que he dejado,
Como brisa suave de mañana,
Acarician mi piel en calidos recuerdos,
Y me pregunto: ¿fuiste mía?
¿Fue tuyo aquel pensamiento?
Fue tuyo aquel tiempo que irremediablemente
Me obligue a darte?
Te pregunto: ¿fue verdadera la falsa mirada?
¿Fue de tu rostro la gélida mirada?
¿o la calidez no pudo ser acaso no mas, que un desvarío de mis maquinaciones?
¿Puede ser acaso que me engañe entre gemidos y alaridos?
Hoy me parecen ustedes tan bellas, tan exquisitas
Tan deseables, como…la luna y su plateado color…
Un dejo de muerte en el deseo de vivir.


(zeath 2009)